Nuestro ideal de belleza se inspira en las personas, en su individualidad, en la sencillez, la armonía y el buen gusto, sin olvidar lo actual y las tendencias del momento, aunque para nosotros la belleza verdadera esta desvinculada del tiempo y de las modas. La belleza en la que creemos está basada en el aprecio por la individualidad.
Nuestra misión es conseguir una imagen armónica, natural, personal y exclusivamente individual, con estilos adaptados al momento, a la persona y su estilo de vida.
Nos gustaría que cada visita a nuestro salón sea una experiencia única, todo el equipo trabajamos para conseguirlo día a día, sin dejar de aprender y disfrutar de nuestro trabajo todos los días, que te relajes, te sientas bien y salgas guap@ es nuestro principal objetivo.
Más de treinta años de amor y pasión por la peluquería.
Gustavo Pardo 7 de diciembre de 1968, hijo de Paquita y de Julian, descubrió muy pronto su vocación por la profesión, no en vano, su padre, peluquero de profesión algo influyó en su pasión por la que ahora es su dedicación. De él heredó su vocación de servicio, precisión por el corte, esfuerzo e ilusión y ciertas dotes de comunicación, de su madre una sensibilidad especial y un sentido de la estética exquisito. El segundo de cinco hermanos, el único que siguió la estela de su padre pero en el sector femenino (sin renunciar a sus orígenes domina el corte masculino como pocos). Sus comienzos fueron con Paco Ansurias, uno de los mejores peluqueros de la época muy reconocido por la sociedad Valenciana, con el que le une una gran amistad y al que reconoce como su «Padre Profesional».
Autodidacta y con un bagaje profesional alargado, trabajo en el salón, sesiones fotográficas, colecciones, pasarelas, editoriales, estilismos, talleres, cursos, etc. Un sin fin de reconocimientos profesionales, premios, publicaciones, entrevistas y lo que está por llegar, con la misma ilusión que el primer día.